Publicado: 11 de Septiembre de 2018
Los vehículos ligeros matriculados a partir de 2011 y los pesados desde 2015 son sometidos desde este lunes en las Inspecciones Técnicas de Vehículos (ITV) a la lectura del sistema de diagnóstico a bordo (OBD) para comprobar sus emisiones.
En una nota, la patronal AECA-ITV explica que se aplica así la nueva revisión del Manual de Procedimiento de Inspección de las Estaciones de ITV. Este manual incluye como principal novedad la incorporación de herramientas de lectura del sistema de diagnóstico a bordo (OBD) para la comprobación del sistema de control de emisiones de los vehículos ligeros y pesados Euro 5, Euro 6 y Euro VI.
De acuerdo con la fuente, no es un nuevo sistema ni se van a medir nuevos contaminantes, sino que a través del OBD se va a comprobar que el control de emisiones que incorporan dichos vehículos "no presenta errores ni averías". También se verificará que no ha sido manipulado ni presenta desconexiones o desmontajes fraudulentos.
Si la ITV detecta alguna avería lo catalogará como defecto grave y obligará al usuario a que la repare, de acuerdo con la patronal.
Aunque la obligatoriedad comienza hoy, la fuente ha recordado que las estaciones están realizando lecturas del OBD a modo de prueba desde hace varios meses para familiarizarse con la nueva herramienta, detectar posibles problemas e informar a los usuarios.
Según el presidente de AECA-ITV, Luis Ángel Gutiérrez Pando, "la lectura del OBD es un complemento a las tradicionales pruebas de control de emisiones, pero no las sustituye". Al respecto, ha asegurado que se trata de "un primer paso para que en un futuro no muy lejano (para el que no hay fecha)" en la ITV se inspeccionen también los sistemas de seguridad activa y pasiva controlados electrónicamente a través del OBD